Sin propiedad no hay libertad

En 2030, no tendréis nada y seréis felices. Ni familia, ni hijos, ni hogar, ni coches, ni trabajo estable. Pero papa estado os cuidará, mientras sigáis siendo útiles a los poderosos oligarcas. Esos sí, seguiréis creyendo que sois libres porque conservareis vuestros derechos de bragueta.

EDITORIAL CAMINANDO POR LA VIDA 13/06/2023

El día 21 de julio de 1959, el Gobierno de España aprobaba el Decreto Ley de Ordenación Económica, más conocido como «Plan de Estabilización» Y al amparo de este decreto se pusieron en marcha, al frente de don Laureano López Rodó, los llamados planes de desarrollo económico y social, en cuya elaboración destacaron los economistas Joan Sardà Dexeus, Enrique Fuentes Quintana y Fabián Estapé.

Fíjate bien querido oyente de cuales eran los objetivos del decreto ley de ordenación económica de 1959:

1.- Fijación de un cambio estable de la peseta con el dólar, la moneda de las transacciones internacionales, fijándose en 60 pesetas el valor de un dólar, lo que en la práctica significaba una devaluación de la peseta.

2.- Reducción del gasto público y congelación del sueldo de los funcionarios

3.- Moderación salarial para luchar contra la inflación.

4.- Reducción del intervencionismo del Estado en la economía.

5.- Liberalización de las importaciones y fomento de las exportaciones.

6.- Estimulación de las inversiones extranjeras, excepto en industrias de guerra, servicios públicos y actividades relacionadas con la información. Hoy, en cambio, el duopolio televisivo es controlado por empresas extranjeras ajenas a los intereses de España.

Los Planes de Desarrollo, que se llevaron a cabo desde 1959, generaron un fuerte crecimiento de la economía española hasta 1974, con una tasa anual de crecimiento del PIB superior al 7% . Estos programas impulsaron el desarrollo de la industria, destacando particularmente la siderúrgica y la fabricación de vehículos. Contábamos con los mejores astilleros del mundo, capaces de construir los barcos más grandes y pesados que se construían a finales del siglo XX.


La progresiva mecanización del campo español produjo que muchas personas del ámbito rural quedaran sin empleo y futuro, pero ello coincidió con un vertiginoso crecimiento de la industria impulsada por los planes de desarrollo, por lo que se calcula que 3.100.000 españoles se trasladaron del campo a la ciudad en la década de 1960. El destino se centró en los focos industriales y del sector servicios de Madrid, Barcelona y País Vasco.

Simultáneamente España se iba convirtiendo en un gran destino turístico. Ya en 1954, el ya existente INE incluía estadísticas de crecimiento turístico que apuntaban una realidad que había despuntado entonces y que, con el paso de los años, se convertiría en el sector con más peso del PIB español.

Más de tres millones de españoles se trasladan a las ciudades y miles de turistas comienzan a llegar a España, pero ¿qué es lo que necesitan todos? Así es, viviendas

Según las estadísticas oficiales, entre los años 1961 y 1973, se construyeron en España 3.347.768 viviendas, sumando otras 358.460 en 1974 y añadiéndose 374.391 en 1975; en definitiva, en esos catorce años, las cifras se elevaban a 4.080.619 viviendas.

Pero lo más importante de todo, te lo voy a contar ahora. En 1960 el 70,6 % de los españoles eran propietarios de sus viviendas, mientras un escaso 22,2 % eran alquilados.

En 1970, diez años después, con casi tres millones más de viviendas construidas, los propietarios habían ascendido al 72,4 % y los alquilados habían descendido a la mitad, un escaso 11,5 %.

Y en las ciudades las estadísticas eran aún mejores a favor de los propietarios, donde el alquiler siempre había sido mayoritario, con sus casas de vecinos y pensiones. En 1970, en tan solo diez años, los alquileres urbanos se habían hundido a un 32,7 %, mientras el régimen de propiedad ya superaba el 52%.

No cabe duda que la política iniciada por los ministros de la vivienda, José Luis Arrese, José María Martínez Sánchez-Arjona y Vicente Mortes de convertir a los españoles en dueños de sus casas había sido todo un éxito. No olvidemos que la propiedad es la otra cara de la moneda de la libertad.

Hoy día, en 2023, sufrimos en las grandes ciudades unos precios de las viviendas muy altos con alquileres también muy altos. Con listas de espera para poder alquilar un piso o una casa. Nuestros hijos lo tienen muy complicado para poderse independizar y formar sus propias familias.

¿Estamos aplicando los remedios adecuados para resolver este problema? No lo tengo nada claro

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